Pambelé: 80 años de un campeón eterno

Bogotá, 23 de diciembre de 2025. “Pambelé al ataque, le mete una izquierda, una derecha, una izquierda. En malas condiciones está el campeón mundial, va a continuar la pelea… izquierda, derecha: ¡Campeón Mundial, Kid Pambelé!”. Así narró Napoleón Perea Castro la pelea por el título mundial welter junior de la Asociación Mundial de Boxeo un 28 de octubre de 1972, día en el que el nombre de Antonio Cervantes Reyes quedó tatuado para siempre en la historia del deporte colombiano. 

Desde ese instante, ese joven de puños certeros, pies que parecían flotar sobre la lona y mirada firme, que salió de San Basilio de Palenque para abrirse paso en el mundo, se transformó en Kid Pambelé, el primer campeón mundial de boxeo que tuvo Colombia. Aquella noche no solo ganó un cinturón: le regaló al país una victoria histórica y la certeza de que los sueños que nacen en la humildad también pueden convertirse en gloria eterna.

Han pasado más de cinco décadas desde esa noche inolvidable de 1972 y hoy, a sus 80 años, Pambelé sigue siendo un referente vivo del deporte colombiano. El tiempo ha suavizado el ritmo de sus pasos, pero no ha logrado borrar la grandeza de su historia ni el impacto de sus hazañas. Su legado permanece intacto: fue campeón mundial durante siete años, defendió su título en 21 ocasiones y llevó el nombre de Colombia a lo más alto del boxeo internacional.

Pambelé no solo ganó peleas, ganó respeto. En cada combate representó la disciplina, la perseverancia y la esperanza de miles de jóvenes que vieron en él la prueba de que los sueños también nacen en la periferia. Su carrera fue una suma de sacrificios, pero sobre todo de victorias que fortalecieron la identidad deportiva del país.

En el marco de la celebración de sus 80 años, el país reconoce su trayectoria y su aporte invaluable. Antonio Cervantes Reyes es uno de los deportistas que hacen parte del programa Glorias del Deporte del Ministerio del Deporte, una iniciativa que honra y acompaña a quienes, como él, marcaron un antes y un después en la historia deportiva nacional. Un reconocimiento a su grandeza y a la huella imborrable que dejó en el ring y fuera de él.

Celebrar a Pambelé es exaltar lo mejor del deporte colombiano. Es volver a escuchar, con orgullo, aquella narración que paralizó a un país y entender que sus golpes no solo derribaron rivales, sino también barreras. A los 80 años, Kid Pambelé sigue siendo campeón: de la memoria, del respeto y del corazón de Colombia.